miércoles, 25 de febrero de 2009

Radikal libre

Acontecimientos de todo tipo a los que no son ajenos los escasos seguidores de este blog, incluído algún político despistado que, inmerso en la fiebre de la campaña, ha comentado en él, con la absurda intención de que yo visite su blog y pierda el juicio hasta el extremo de que llegue a votarle, han extremado mi ya de natural impulsivo carácter, hasta el punto de situarme en el anarkismo más radikal, donde no excluyo siquiera el uso de la violencia.
Cuidadín los que me conozcan cuando me vean por la calle, porque llevo unos días en que difícilmente distingo las bromas de las ofensas y me disparo como un bazzoka.

Puede que fuera eso lo que me pasó el viernes con aquella señora o puede que no, pero el caso es que no me tomé a broma su afirmación y ella tampoco mi respuesta.
Llego apresuradamente con el chaval a la representación del carnaval vasco de su ikastola, justo cuando están empezando, después de una comida familiar en la que mi esposa se queda de charla un rato más. Le he puesto el sombrero de cintas y un pañuelo colorido, pero no he podido encontrar la blusa de flores que usó el año pasado, a pesar de haberla buscado febrilmente durante un buen rato.
Mi hijo se integra en la confusión del patio y yo me quedo observando desde el cordón que formamos los padres. El chaval no desentona en absoluto. Llega mi mujer, le busca con la mirada y me espeta: -¿Cómo no le has puesto la blusa?
-Pues porque la he buscado un buen rato y no la he encontrado...
-Pues así va fatal, voy a buscarla...
Y en ese momento, como en una psicodélica astracanada, una mujer a la que no conozco de nada, se gira y me suelta: -Los hombres siempre igual, no se les puede pedir que hagan nada...
La encaro y le digo: -¿Así? ¡Todos los hombres! ¿Ud. por qué generaliza señora? ¿Sabe acaso el tiempo que he estado buscando la blusa?
- No es para ponerse así- me dice
-¡Ah!, ¿no? Y cuando alguien generaliza sobre las mujeres ¿Ud. cómo se lo toma?
-Bueno, parece que tienes un mal día...
-Sí, seguramente tengo un mal día... y si Ud. habla sin saber, lo empeora.
Y me largo de allí.

Bueno... seguramente aquella tarde empezó algo en mi cabeza, se estropeó mi bioquímica o se me hincharon las pelotas, pero desde entonces estoy a la que salto.
¿Preocupado? ¡No! ¡Me lo estoy pasando pipa!
Mejor preocuparos vosotros ja ja jajiajajia ja ja...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Una bomba de relojería por las apacibles calles de Donostia!
Ánimo con la vida, Kanif.

Necio Hutopo dijo...

Venga, que de vez en vez es bueno sembrar la desconfianza y el recelo a nuestro paso...

Duquesa de Katmandu dijo...

Esa "señora" se merece una golpiza suave, del tipo coscorrón en la cabecita, y luego pisarle el dedo chiquito del pie.

beso de madre violenta

Anónimo dijo...

No te imaginas la cantidad de contestaciones de ese tipo que he dado a entrometidos ni lo que me gusta que me cuenten cosas como esta, je je je. De verdad que disfruto.