sábado, 4 de abril de 2009

Esta realidad de plástico

Aveces lo intento, pero no me sale poesía. Intento desarrollar un tema en verso y me sale una cosa que ni poesía ni prosa. Me dieron el consejo de que lo intentase con la prosa poética, pero me temo que tampoco es eso... así que lo voy a llamar Poesía Proética porque, además, persigue ese efecto: La reflexión ética. (Aunque se quede en un intento pedante ja ja ja ja)



Esta realidad de plástico
tramposa como una foto digital
con colores exagerados
sin brillo, sin profundidad.
Como adolescentes sin granos,
sin rebeldía y con pantalones rotos de doscientos euros.
Estos vagos pagados al triple
y esos curritos pagados con miseria.
Esos financieros jugando al Monopoly
con el pan de tus hijos y la sangre Asia...
Esas limusinas grandes como sus egos, negras como ataúdes,
pesadas como conciencias.

¡Escarba hasta sacar el último diamante
que yo quiero un collar para mi perra en celo!
¡Que arranquen los negritos coltán para mi móvil
y mando un sms a esa felatriz rusa!
Ya no quedan anchoas... ¡Pero aún hay esturiones!
¡Caviar sobre tu vulva!
¡New York es una fiesta
y Obama un negro bueno!
¡Los donuts son comida y el mundo es un pañuelo!

Cuando todo esto acabe, y el cáncer nos devore
envueltos en toxinas, y respirando azufre
te palparán el Rolex y aún reirán a gusto
si no es de oro macizo con esfera de cuarzo.
¡No pierdas ni un segundo!
¡Alguien tiene tu parte!¿Quién se llevó tu queso?
¿Qué haces que no llevas zapatos italianos?
Pareces gilipollas, un pobre desgraciado,
tu habla de moral, que yo de mi Ferrari.
Mañana me comentas, me llamas al despacho
o mandas un e-mail, que sale más barato.

2 comentarios:

Duquesa de Katmandu dijo...

La mía es de siliconas (mi realidad), así me aseguro de que quede algo de mí al morir (o se descompone??).

beso sin colágeno

Necio Hutopo dijo...

Me parece a mi o alguien ha cambiado su ávatar?

Vale, del post... Bueno y hasta podría decir que suscribo.