lunes, 11 de febrero de 2008

Estornudos.

La encuesta que propuse, vital para el conocimiento del ser humano, ya se ha cerrado, y la repugnancia del moco sobre el teclado gana con un 66% a la del moco sobre la pantalla. Se me ocurre que da más asco en el teclado porque muchos compartimos equipos, y eso de poner el dedo en el moco ajeno... como que no.
Yo los reparto por igual con mis series de estornudos incontrolables, merced a mi alergia a diversos pólenes. Este año la polinización se ha adelantado gracias a este invierno tan cálido que hemos tenido. Llevo estornudando desde finales de enero. Antes solía empezar en marzo. Si el verano se adelanta y es seco, la polinización cesará y dejaré de estornudar antes. Si es cálido y húmedo seguiré estornudando hasta que empiece el frío. Se podría estudiar el avance del cambio climático en la recurrencia de mis estornudos...
No obstante lo llevo bastante bien, con un generoso consumo de pañuelos de papel y antistamínicos ocasionales.

Sostengo la teoría de que las personas inquietas son más propensas a padecer alergias y, como yo supongo inquietos a los blogueros, me gustaría preguntar cuántos de mis acérrimos tienen alguna alergia.
¡Venga, desmontadme la teoría!

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo no puedo, tengo alergia a las encuestas.

jose.etxeberria dijo...

Mi adorable torracollons ;-) La encuesta ¡ya pasó!

Anónimo dijo...

No amigo, me refería a la pregunta de cuántos tenemos alguna alergia. Aunque no la hayas montado con el glamour de un gadget en el lateral, al fin y al cabo es una encuesta. Lo siento, me parece que con la condición de torracollons se nace. Y que conste que estoy en una fase de comentar poco por ahí y te has salvado de que pensara algo que decir sobre tus carnavales.

No seas tan egocéntrico y búscale un nombre al blog, hombre.

jose.etxeberria dijo...

Pues fíjate, sí, pensaba cambiarlo pero al final me he convencido de que yo sólo sé escribir sobre mí mismo. Creo que, en el fondo, siempre escribimos de nosotros mismos...
¿No era acaso eso un blog? El diario de a bordo de un buque. Bueno, pues, en este caso, el buque soy yo.

Anónimo dijo...

Yo creo no tengo ninguna alergia, pero desde que me quedé embarazada, no puedo parar de estornudar, y echar mocos, claro. Además no son unos estornudos normales, son como terremotos. ¿¡Generoso consumo de pañuelos de papel!? Lo mío no era generosidad, era puro derroche, así que he pasado directamente a tener un rollo de papel higiénico en el cajón de mi mesa de trabajo. Sí, ya sé que no tiene mucho glamour, pero es práctico...

Anónimo dijo...

Por cierto, con lo del moco en el teclado, me has recordado a un antiguo amor de infancia. Yo tendría unos doce años y estaba enamoradísima de un compañero de clase. Nos sentábamos de cuatro en cuatro, dos frente a dos, y él estaba frente a mí. Un día estornudó, y un moco cayó en mi mesa, encima de una regla. Absolutamente todo mi amor preadolescente se esfumó en ese momento....

Necio Hutopo dijo...

A los productos del mar (pescados, mariscos, moluscos... Cualquier cosa que haya salido del mar)...
Y no siempre lo fuí, de hecho los mariscos y algunos pescados son, en esencia, una de mis comidas favoritas... Pero es que ahora los pruebo y empiezo a incharme.

jose.etxeberria dijo...

Lo suponía.
A mí me encantaba la miel, pero como contiene restos de polen, me entran unos picores en la boca que me joden vivo. Y empecé hace unos años. Antes sólo me jodía el plen del aire.