jueves, 13 de diciembre de 2007

Coincidencias

No se puede ser original. Después de 6000 años de historia y con 6,637,223,330 habitantes en el planeta es muy difícil tener una idea que otro no haya tenido antes. O inventar un nombre nuevo.
Yo quería contar por qué me puse de apodo Kanif. Lo primero que se me ha ocurrido es buscar un poco en google, y han salido Kanif a patadas: Tenemos un Joe Kanif de una tele alemana, un proyecto de una ciudad ecológica llamada Kanif, archivos de todo tipo llamados así, un tío que me inquieta pues se ha puesto Kanif por la misma razón que yo, vive en un universo paralelo, y tiene navajas y hasta una katana... y lo que más me mola, cuatro ciudades en todo el mundo, tres de ellas en micronesia, con ese nombre.


Busco fotos del sitio y me encuentro con esta en la que se puede ver a los habitantes de aquel lugar en 1969. ¡Justo el año en que yo nací!





Luego sigo buscando y me encuentro con esta otra: un abuelo del lugar con su nieto...
...y claro, me he sumido en la melancolía.

5 comentarios:

Maripuchi dijo...

Cuando abrí el blog, quise llamarlo Maripuchi.blogspot... pero una quinceañera (doceañera más bien) me había pisado el nombre...

Ahora, acabo de hacerme con el dominio jaja es míooooo, mi tesssoooroooo.

jose.etxeberria dijo...

¡Cielos! Eres una diablesa posesiva >:-)

Anónimo dijo...

!qué bien se le ven las venas principales!
La que está arriba ,digamos se llama basílica, la de abajo cefálica una pequeña que las une la cubital y la otra rama la mediana.
Es una pasada el brazo de ese hombre.

PS:kanif he intentado registrarme y me da error con la clave una y otra vez.Estoy en ello.

jose.etxeberria dijo...

Un brazo honesto de un hombre honesto que ha trabajado para sobrevivir. Honra el nombre de Kanif. Por eso lo he puesto. A mí también me encanta la anatomía...
Gracias por intentar lo del registro.
Un abrazo.

Necio Hutopo dijo...

Cuando me busco en San Google por mi nick, casi siempre aparezco sólo yo... Y cuando no, es que alguien más habla de mi.

Será difícil, pero yo, cuando menos, casi que lo he logrado (aunque reconozco que los Yuyos y los Hutopos fueron más una creación colectiva y coyuntural)