Siempre me han gustado los chistes. Incluso añadiré el tópico: de chaval me sabía un montón pero ahora se me han olvidado.
Un chiste es un ejercicio de equilibrio prodigioso. Qué es lo que nos hace reír en un chiste sigue siendo, aún hoy , un misterio. Freud intentó desentrañarlo y le quedó un tocho de lo más aburrido. Seguramente se estaba metiendo poca coca.
El humor es una rasgadura en la realidad; una grieta que nos permite ver el otro lado. Que nos permite comprender que las cosas podrían ser de otro modo. Que la lógica que aplicamos a la realidad, y que creemos inamovible, no es más que un punto de vista; una óptica que nos conviene, que creemos sólida, pero que se tambalea en cuanto la ponemos a prueba.
Y el chiste es humor condensado. Un buen chiste es un destilado de humor.
Cuando nos reímos de un chiste, en realidad nos estamos riendo de nosotros mismos, de nuestra inteligencia que creíamos infalible; de lo que dábamos por hecho si cuestionarlo.
Me he cascado esta introducción, pretendidamente culta, porque quiero contar tres chistes.
Los he escuchado en"El rey de la comedia". Sí, ese concurso cuyo casting están emitiendo en la 2, y que es una galería de cronopios de lo más variada.
Los soltaron seguidos haciendo una serie de "chistes sobre vascos". Hacía tiempo que no me reía tan a gusto.
-Oye Patxi, ¿sabes que han descubierto que hay una cultura más desarrollada que la vasca?
-!Ah, sí! ¿Qué piedra levantan?
Sabéis como reparte la comunión un cura vasco: -¡AHÍ VA LA HOSTIA!
-Oye Peio, ¿A ti te gusta la pintura?
-Sí pero, a partir del segundo bote, me empalaga.
4 comentarios:
A mí me gusta el del Patxi que se va a casar con una chica de Madrid, como no tiene experiencia le pregunta a su padre...
- Oye aita, cuando yo casar que es lo que tengo que hacer?
- Pues mira Patxi, cuando te cases debes invitar a todo el pueblo a comer, para que vean que los vascos somos generosos. A tu mujer la tienes que llevar en un coche de lujo para que vea que los vascos somos imaginativos. Después de la boda la tienes que invitar a un hotel de cinco estrellas para que vea que los vascos somos espléndidos. Cuando estés en el hotel con ella la tienes que subir a la habitación por las escaleras en volandas, con un solo brazo, para que vea que los vascos somos fuertes y enérgicos. Cuando estés frente a la puerta de la habitación la debes entrar en brazos para que vea que los vascos somos caballerosos. Cuando estés en la habitación la pones en la cama suavemente para que vea que los vascos somos sensibles. La desnudas lentamente y toda ella, para que vea que los vascos somos expertos. Y cuando la tengas desnuda ...te cascas tres pajas para que vea que los vascos ante todo, somos independientes...
Para mi, uno de los mejores es el de los dos que se están despidiendo en el bar, y va uno y dice:
-Venga, Patxi, hasta mañana si Dios quiere
-Mil euros a que quiere!!!!
Gracias Maripuchi, gracias Goyo.
¡Son muy buenos!
Si seguís aportando podríamos hacer un catálogo de chistes sobe vascos...
¡Prometo recordarlos!
Un abrazo.
-Oye Mikel, a mi hija le hemos puesto Rocio.
-No me parece un nombre muy vasco.
-Ya, pero nosotros la llamamos Eskartxa.
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